No nos referimos a viajes en globo ni a vuelos en parapente. Nuestro país cuenta con más de diez funiculares, trenes cremallera y telecabinas que nos transportan no solo a disfrutar de bellas panorámicas sino a parques de atracciones, castillos, lugares emblemáticos y zonas para practicar senderismo en familia… Para los peques la emoción ya empieza nada más subir a estos particulares medios de transporte; arriba les esperan otras sorpresas. Si estáis ya pensando en las vacaciones de verano o podéis hacer una escapada de fin de semana, tened en cuenta estos destinos con mucho encanto.
Funicular y Parque de Atracciones del Monte Igueldo. San Sebastián
La conocida también como la Bella Easo es una de las ciudades más bonitas de nuestra geografía y toda su belleza se disfruta más desde la altura. La bahía de La Concha se puede contemplar desde tres montes: Urgull, Ulía e Igueldo. Pero éste último une a la espectacular visión uno de los parques de atracciones más antiguos de España.
El funicular del Igueldo –en realidad es un tren cremallera con vagones de madera– empezó a funcionar en 1912. En su recorrido a la cima del monte –en la zona oeste de la ciudad, cerca del Peine del Viento- se disfruta de zonas arboladas. Funciona de 11:00 a 20:00 y sale cada 15 minutos. El precio es de 2,35 euros (ida y vuelta) para niños y de 3,15 euros (ida y vuelta) para adultos. El billete incluye la entrada al recinto.
Una vez arriba se disfruta de espectaculares vistas desde el mirador y os encontraréis en medio de un parque con 20 atracciones, impoluto pero con el encanto de la decadencia: un carrusel ‘de los de antes’, casetas de juego, casa del terror, laberinto, estanque con barcas… y dos propuestas a las que nadie se resiste: el río misterioso, en el que se bordea el monte en barca, y la montaña suiza, un trenecillo que realiza el mismo recorrido. Tampoco puede faltar la visita al faro del siglo XIX. El aperitivo o la merienda se pueden realizar en la terraza del restaurante. Las atracciones funcionan de 11:00 a 14:00 y de 15:30 a 20:00. La estancia en el mirador es hasta las 22:00.
Telecabinas al Castillo de Montjuic. Barcelona
Este moderno funicular funciona como un metro y en poco más de dos minutos os traslada al Parc Montjuic con sus zonas verdes, al Estadi Olímpic y a la Fundación Joan Miró. Pero nuestra propuesta es el Castillo. El funicular funciona, en estas fechas, de 7:30 a 22:00 (de lunes a viernes) y de 9:00 a 22:00 (sábados, domingos y festivos). El precio es similar al del autobús o Metro.
El Castillo, declarado Bien Cultural de Interés Nacional en 1988, cuenta con una exposición permanente y varias temporales. Pero durante este mes, los domingos por la tarde, de 16:00 a 19:00, se celebra el ciclo de actividades familiares, de acceso gratuito. En esas horas los peques disfrutarán de lo lindo. El patio de arma se transforma en un laberinto, se celebran conciertos y bailes, se enseña a montar en monociclo y a manejar un diábolo. También hay juegos gigantes y talleres de todo tipo.
Por otro lado, el 18 de mayo, con motivo de La Noche de los Museos –de 19:00 a 1:00- el castillo abre sus puertas a todo el mundo para participar en visitas guiadas. Habrá también música y foodtrucks para cenar de manera informal.
Aparte de estas dos actividades para ocio familiar gratuito, el Castillo se puede visitar de lunes a domingo, de 10:00 a 20:00. Los domingos el acceso es gratis a partir de las 15:00 y los primeros domingos de mes durante todo el día. Consultar precios en ajuntament.barcelona.net.
Funicular a Bulnes, una aldea de cuento. Cabrales (Asturias)
A esta encantadora localidad, que apenas sobrepasa la veintena de habitantes, no hay acceso por carretera; o bien se va a pie desde el pueblo de Poncebos (a 5 kilómetros) o bien se utiliza el funicular, que funciona desde principios de este siglo. En 7 minutos este medio de transporte nos llevará al corazón de los Picos de Europa.
En temporada alta (del 18 de junio al 18 de septiembre) funciona de 10:00 a 20:00 y sale cada 30 minutos. Hasta esa fecha, y con la misma frecuencia en la salidas, de 10:00 a 12:30 y de 14:00 a 18:00. El precio por niño de 4 a 12 años (ida y vuelta) es 6,71 euros y por adultos (ida y vuelta), 22,16 euros. Merece la pena porque, ya en la aldea, además de disfrutar de los platos locales –cuenta con dos restaurantes y alguno más en temporada alta-, podemos realizar rutas de senderismos con los peques.
Desde El Castillo, que es el nombre del barrio alto de Bulnes, ya podéis disfrutar de un paisaje montañoso impresionante. A unos 15 minutos, en una ruta que se puede hacer con niños siempre que lleven el calzado adecuado, está el Mirador, desde el que se ve el Naranjo de Bulnes. Pero hay otras muchas rutas que hacer en familia atravesando el Puente Colines. En el pueblo os las indicarán.
B. C.
