Mímesis es un ritual escénico iniciático en la danza para bebés y sus familias que aprovecha las posibilidades de las nuevas tecnologías y el vídeo-mapping para ofrecer un espectáculo participativo donde la danza, lo visual y el espacio sonoro configuran la puesta en escena.

Mímesis, a través de un ritual escénico iniciático, construye un ecosistema escénico para que sea habitado y compartido por intérpretes y familias participantes. Al igual que las anteriores producciones de Zig Zag Danza para la Primera Infancia, presenta una propuesta que parte de la honestidad y el respeto, preservando la capacidad de desarrollo creativo de los públicos más pequeños, una cuidada producción internacional de más de tres años realizada entre España y Alemania.

Los asistentes, sentados 360 grados alrededor del escenario, ocupan un lugar donde cada familia es acompañada individualmente por los intérpretes a modo de invitación al rito. Todo el espacio es voluble y cambiante, todo el concepto estético de la propuesta se basa en el movimiento: objetos, imágenes e intérpretes interactúan para generar una propuesta dinámica que invita a la atención y la concentración.

Los participantes pueden abordar el espacio al final para experimentar y explorar el mismo de forma libre y autónoma, teniendo un tiempo para incidir en él y transformarlo a partir de lo que han visto. Se trata de crear un espacio común de encuentro para que puedan expresarse libremente a partir de lo que han presenciado y lo que esto les haya sugerido. Los intérpretes interactúan implicando al público asistente en un espacio atmosférico de imágenes, sonoridades y movimientos.

Mímesis transita en un delicado equilibrio entre el movimiento, la música y la imagen, de tal forma que ninguno de estos lenguajes queda al servicio del resto, sino que conservan su entidad en una relación horizontal.

Mímesis es un ritual escénico iniciático en la danza para bebés y sus familias que aprovecha las posibilidades de las nuevas tecnologías y el vídeo-mapping para ofrecer un espectáculo participativo donde la danza, lo visual y el espacio sonoro configuran la puesta en escena.

Mímesis, a través de un ritual escénico iniciático, construye un ecosistema escénico para que sea habitado y compartido por intérpretes y familias participantes. Al igual que las anteriores producciones de Zig Zag Danza para la Primera Infancia, presenta una propuesta que parte de la honestidad y el respeto, preservando la capacidad de desarrollo creativo de los públicos más pequeños, una cuidada producción internacional de más de tres años realizada entre España y Alemania.

Los asistentes, sentados 360 grados alrededor del escenario, ocupan un lugar donde cada familia es acompañada individualmente por los intérpretes a modo de invitación al rito. Todo el espacio es voluble y cambiante, todo el concepto estético de la propuesta se basa en el movimiento: objetos, imágenes e intérpretes interactúan para generar una propuesta dinámica que invita a la atención y la concentración.

Los participantes pueden abordar el espacio al final para experimentar y explorar el mismo de forma libre y autónoma, teniendo un tiempo para incidir en él y transformarlo a partir de lo que han visto. Se trata de crear un espacio común de encuentro para que puedan expresarse libremente a partir de lo que han presenciado y lo que esto les haya sugerido. Los intérpretes interactúan implicando al público asistente en un espacio atmosférico de imágenes, sonoridades y movimientos.

Mímesis transita en un delicado equilibrio entre el movimiento, la música y la imagen, de tal forma que ninguno de estos lenguajes queda al servicio del resto, sino que conservan su entidad en una relación horizontal.