La situación del coronavirus se está complicando cada vez más. Las repercusiones sociales, sanitarias, económicas y laborales son impredecibles. La realidad es que es difícil creerse los pronósticos, especialmente los del representante del Gobierno Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, quien hace pocas semanas dijo textualmente «España no va a tener más allá de algún caso diagnosticado de coronavirus» y que además alentó a que la gente fuera a la manifestación del 8-M a la que acudieron 120.000 personas, precisamente cuando ya se sabía que la epidemia había dado un gran salto cuantitativo.
Un día después de la manifestación todo ha cambiado. Colegios cerrados por al menos 15 días, igual que grandes espectáculos, desinfecciones de transportes públicos, teletrabajo… en fin, una situación caótica. Lo más preocupante es que sigue la escalada de muertos, lamentablemente de las personas más sensibles, los mayores.
Pero además, las medidas emprendidas por la Comunidad de Madrid –no discuto que puedan ser acertadas- nos provoca a los padres una situación inédita hasta la fecha, y que da nombre a nuestro medio ¿Qué hacer con los niños?
Caos en la familia
Humildemente tengo que reconocer que no tenemos una respuesta a esta pregunta (ni mucho menos). Las contradicciones son múltiples. Se recomienda teletrabajo, y la verdad que poca gente tiene la oportunidad de que se lo permitan. Pero en el caso de que sea así, ¿quién puede trabajar con varios peques correteando ociosos por la casa? Si en el cole les mandan deberes por Internet, ¿quién les vigila, quien hace y compra la comida? Está claro que al cónyuge que se quede en casa le van a dar ganas por momentos ‘de cortarse las venas’. ¿Y los que puedan llamar a los abuelos? No voy a responder a esta cuestión, que cada uno lo haga por sí mismo.
Por la cantidad de testimonios que recibimos –y hoy es solo el segundo día en el que se ha implantado la medida- ya ha empezado la desesperación.
Desde Qué Hacer con los Niños –desgraciadamente- no tenemos respuestas mágicas, pero al menos vamos a intentar daros ideas para paliar este temporal de la mejor manera posible. Pensando en el fin de semana y las limitaciones de ocio, proponemos artículos con recomendaciones de juegos de mesa , preparación de recetas, comida a domicilio, teatros que inteligentemente reducen el aforo a un tercio, clases de matemáticas online, libros… No decimos nada de videojuegos, televisión o Internet, porque es algo que nuestros hijos van a devorar estos días. No nos quedará más remedio que levantar un poco la mano. Eso sí, no animemos la psicosis colectiva viendo más pelis sobre virus y pandemias (en estos días son los filmes con más descargas).
Por supuesto habrá que salir algún día. Pero considerando en conciencia las recomendaciones propuestas por las autoridades sanitarias, aunque estén muy cuestionadas por algunas prestigiosas sociedades científicas especializadas en enfermedades contagiosas. Creo que una buena opción es pasar un día en el campo con la familia fuera de las aglomeraciones de personas.
En épocas de pánico generalizado es fundamental que conservemos en el mejor estado posible, además de nuestra salud física, nuestra salud mental.
